A Spider's Thread [LIBRE]

[Ju-Ken]

3:00 AM. Calles desiertas... Un silencio que casi rayaba en lo agobiante. El trabajo estaba ya hecho, y no parecían haber testigos de aquel sutil incidente. Sutil si es que cabía posibilidad de compararlo con enfrentamientos pasados, en donde aún así ni siquiera la policía era capaz de dar cuenta de lo ocurrido para seguirle el rastro. Trabajos perfectos; no podía pedir menos.

Tocaba la retirada. Se dispuso a dar las últimas señales a sus hombres para despejar la zona y limpiar lo poco que podía salir de los parámetros de lo que significaba una 'noche pacífica' como pocas en aquel tipo de barrios, que aún a pesar de estar dentro de una de las peores zonas de Japón, poseía muchos observadores que no dudaban en delatar frente a cualquier anomalía, más aún a alguien como él quien ya tenía su propia marca en su ''modus operandi''.
Adecentó el aspecto de su pistola con un pequeño paño que guardaba en su chaqueta, disponiéndola luego en el sitio de siempre, aprovechándo aquel impulso para sacar un cigarrillo que no tardó en encender para relajarse ahora que la acción parecía dar el sello de término.
¿Ruido?. Miró unas cuantas veces a su alrededor en una forma de cubrir a los últimos hombres que quedaban para que se fueran en el mismo silencio y anoninismo con el que habían llegado. Se dispersaban, y luego, él haría lo mismo con sus pasos a través de la noche.

Su caminar iba flojo a medida que cruzaba las calles principales y le daba caladas a su cigarrillo en ello. Posiblemente por el cansancio y la falta de horas de sueño, quien sabe, después de todo, no era en absoluto fácil el trabajo entre las sombras, menos cuando el trabajo te exigía como jefe el mantenerte cuerdo hasta las últimas circunstancias, llegándo a caer en los engaños y juegos sucios si es que con ellos se podía mantener a flote el grupo en momentos críticos. La imposición de cada día, la que le mantenía activo y fuera de la rutina.
Suspiró con pesadez llevándo entre tanto su mano libre a sus cabellos para despejar su vista, alzándo la mirada para nuevamente dedicarse a observar las calles dentro de lo que significaba su desconfiado juicio frente a cualquier mínimo sonido de los alrededores.
La noche favorecía muchos escondites, estaba claro, y era esa característica que le mantenía sin pasar por alto los detalles.
Ahí venía nuevamente y esta vez no se le escaparía.

Sus pasos se detuvieron por un instante para rodear luego la calle antes de girar de improvisto en dirección de lo que había escuchado segundos antes, avanzándo con esa misma calma amenzadadora de siempre, ya cogiéndo las últimas caladas de su cigarrillo antes de olvidarlo en el camino.
Podía distinguir a su vigilante una vez se encaminó a la ausencia de luz del callejón que ahora tenía enfrente.
Sin salida.
Se mantuvo a cierta distancia de la otra persona, atreviéndose a fisgar dentro de lo que le era posible sobre la figura desconocida. - ... ¿Buscas algo de casualidad? -. Sus palabras se dejaban escuchar con un tono áspero mientras que una se sus manos iba a esconderse en uno de sus bolsillos y la otra la mantenía en duda acerca de coger o no al arma; una idea que de acuerdo a las reacciones ajenas comenzaba a rechazar. Le parecía inocuo pero, no se dejaría convencer aún. - o... tal vez, ¿estás perdido(a)? -

[Gong Li]

Había salido desde temprano y no había regresado al club. Quería conocer más la cuidad en la que estaba ya que hacía unos días que había llegado.

Caminó sin un rumbo fijo. Solo miraba las calles y seguía caminando.
Se había hecho tarde, pero las ganas de regresar a su "hogar" eran escasas.

Llegó hasta las zonas en las que se veía la lujosidad iba bajando. Había mas gente diferente.

Ya estaba cansada de tanto caminar, por lo que se sentó en una banca de la calle. Echó el cabello hacia atrás y ató solo la parte superficial de su cabello en un pequeño moño dejando que cayese lo que quedaba de su largo.

Miraba que la masa de gente comenzaba a disminuir. Cada vez, menos gente habitaba las calles.

Recostó la cabeza hacia atrás cerrando por un momento los ojos.
Los volvió a abrir cuando empezó a sentir que la gente se guardaba. Ahora ya no había nadie habitando las calles.

Ladeo la cabeza buscando entre su kimono el reloj que tenía.
3 am.

- Pero qué rápido se pasa el tiempo... - murmuró volviendo a guardar el reloj.

Se levantó de la banca alisándose la vestimenta con las manos y caminó un poco mas por las silenciosas calles.

Mas un húmedo ruido le hizo bajar la vista lentamente y con cierto enojo. Su kimono se había manchado con un poco de agua sucia que había pisado.
Suspiró pesadamente entrecerrando los ojos y levantó un poco el largo de la vestimenta caminando hacia una esquina cerca del callejón.
Se agachó ligeramente viendo que tan grave había resultado la mancha. No era grande, era pequeña, pero al fin y al cabo, seguía siendo una "asquerosa" mancha en su hermoso y fino kimono

Levantó la mirada viendo a un hombre caminar con cierta "rapidez" por la calle. Ladeo el rostro viéndoles. Pero luego vio a otro, y otro.
¿Por qué se iban en tanto silencio?

Caminó sin hacer ruido hacia el callejón, pero el ver a otro hombre mas saliendo de este optó por retroceder y ocultarse en la sombra.

¿Quién era ese hombre? y ... ¿Por qué llevaba un arma?
Se quedó en silencio observándole. Caminaba lento saliendo del callejón.
Se movió lento para poder salir también mas no contaba con que aquel hombre se giraría. Descubriendole.

Se quedó en silencio mirándole desde su lugar. No podía distinguir bien su rostro por la oscuridad del lugar.
Escuchó su voz hablarle.
¿Qué iba a decirle?

Sonrió de lado ligeramente por la situación en la que se encontraba.
Escondiéndose de alguien a quien no conocía en lo absoluto.

- Perdida no sería la palabra correcta en este caso... y no buscaba nada en especial. ¿Por qué detuvo su paso? ¿Va a ... hacerme algo? - preguntó con tono calmado como siempre solía hablar. Pasó una mano por su cabello retirándolo de su rostro porque comenzaba a incomodarle.

Sus ojos se tornaron dorados y trataba de visualizar bien al hombre.
En definitiva no le conocía de nada.
Seria eso... ¿Bueno o malo?

[Ju-Ken]

Se mantuvo en la misma posición, expectante ante aquella figura extraña frente a sí. Una rareza si es que se le permitía el decirlo, ya que de entre personas y personas con las que se topaba usualmente por su trabajo, nunca le había tocado ver a alguien que aún ocupase tal tipo de vestimentas, era al menos lo que lograba ver a causa de los débiles halos de luz de los faroles de la calle.
La época y la temporada simplemente no lo hacían del todo correcto, y sin embargo, debía admitir que a aquella mujer podía perfectamente presumir su apariencia frente a otras damas.

Parecía estar sola, o al menos, dentro de esa seguridad que demostraba tanto en sus palabras como en su propio rostro, podía certificar aquello... claro, juzgando además que en aquel lapsus de silencio entre ambos nada parecía suceder.
Anotaba esos pequeños detalles a medida que los segundos transcurrían: respiración normal, actitud serena, su misma forma de presentarse... nada parecía indicar que aquello pasase más allá de una simple casualidad. Un encuentro fortuito.

Aparentemente su mirada había logrado dar con algo interesante en aquella chica, un algo que resultó ignorable dentro de lo que eran sus verdaderas fijaciones.

¿Aquellos ojos habían cambiado?, ¿o... era una simple ilusión a causa del cansancio?.

Su mano terminó de dudar al respecto de sacar o no el arma y fue a refugiarse a su otro bolsillo mientras observaba a la chica con el mismo detenimiento que en un principio, asintiendo a sus palabras con suavidad.
- Ya veo... Si es así como dices, me disculpo por mi rudeza - Terminó por responder luego de un instante, tornando su voz un poco más apacible dentro de lo que era su temperamento.

Sus pasos retrocedieron poco a poco una vez notó ese silencio perdurar en los alrededores. El hecho de que no había nadie en los alrededores tomaba más veraz. Su insistencia podía disminuir ahora.
Le estaba dejando el camino libre para que saliera de aquel 'encerrón' en el que la había dejado, sacándola además de la incertidumbre de aquella pregunta que había quedado al aire minutos antes.

- No tengo razones para atentar en contra tuya. No soy un abusador tampoco por lo que mi respuesta es negativa. - Inclinó su cabeza en un ligero ademán de cortesía en conjunto con un suave movimiento de su mano, indicándole el camino por el que antes supuestamente seguía minutos antes.
Su silueta de oscuras vestimentas se hacía visible ahora.

Era definitiva la idea de que aquella mujer tenía un 'algo'. Sonrió sutil

- Es peligroso andar sola a estas horas, todavía más por esta zona y cuando no se tiene real conocimiento de ella... - comentó mientras le veía dudar frente al libre albedrío que le había concedido; lo normal, después de todo, resultaba probable el que algo haya presenciado en un primer momento antes de dar con ella. - Por eso mismo, procure tener cuidado y volver a la próxima con alguna escolta - Su mirada volvió a ella luego de un instante. Estaba asumiendo por esas vestimentas lo imposible de la idea de que ella perteneciese a barrios bajos como aquellos, en lo absoluto se manifestaba en un bajo perfil.
- Puede continuar con su caminata nocturna, señorita. -

[Gong Li]

Se quedó observándole mientras le hablaba. No se había movido de su posición.
 
Le echó un vistazo completo. Su sentido de la orientación le decía que al menos tenía lo suficiente como para defenderse contra él por si algo ocurría. Mas cuando le sintió sin cierta incertidumbre de verla como un enemigo, se relajó  más.
 
-          No creo que sean necesarias las disculpas – habló en el tono que había empleado anterior, siempre calmada, serena y con cierta paciencia al hablar.
 
Respiró mirando el callejón y volvió a pasar una mano por la longitud de su cabello y con la otra mano sujeto ligeramente la falda del kimono para que pudiese caminar en cuanto lo hiciera.
 
Al ver que retrocedía dejándole el camino para que pudiese salir. Se adelantó un poco dando sólo un par de pasos lentos como habitualmente caminaba dando la ligera sensación de que se deslizaba.
 
Escuchó lo que le dijo. << No creo que abusador sea la palabra para caracterizarlo >>
 
Pudo verle con más claridad debido al movimiento que había realizado al retroceder. Tomó nota de todos sus rasgos físicos de una sola mirada. << Que barba más peculiar >> sonrió para sus adentros.
 
Se quedó quieta mirando el camino de salida. ¿Sería oportuno salir ya?
 
-           Cuidado siempre tengo…señor. Pero una escolta… - sonríe leve - ¿La ve realmente necesaria? Se cuidarme sola… y no requiero de un portar un arma para hacerlo – dijo tranquilamente con cierto tono gracioso. A pesar de no haber sido el mejor encuentro, había sido su primera charla de la noche, y en cierto modo, no le había parecido tan mal aquel bizarro encuentro.
 
Avanzó nuevamente un par de lentos pasos más, esta vez quedando ya más cerca de aquel hombre del que había dudado inicialmente.
 
Volvió a sacar el reloj de sus vestimentas, e hizo una ligera mueca. Debía regresar al club, pero no quería hacerlo ya. << Ya estoy retrasada… un par de horas más no harán la diferencia >>
 
Miró al hombre y ladeó una sonrisa no muy elaborada.
 

-           ¿Debería continuar con la caminata? No veo que haya algo más interesante por visitar a estas horas… 

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